El intermedista cubano jugó desde 1966 a 1974 con el Escogido.
Fue un bateador de .282 de por vida con el uniforme rojo, siendo sus mejores años los de 1967-68 y 1969-70, en los que promedió 325 y 323, respectivamente.
Se caracterizaba por ser un gran bateador de contacto ya que con los Leones se ponchó solo 85 veces en 1,027 turnos.
Integró el equipo campeón de 1968-69.